Los contrastes de la vida, encontrarlos no es algo necesariamente alegre, es un golpe contra la puerta de vidrio que sabes que existe pero no siempre la ves, es entonces cuando abrís un poquito mas los ojos y entendes que este mundo es duro y pesado, siempre siempre habrá alguien mas jodido que vos, intentando llevar esa carga y en una montaña mucho mas alta, no es posible, pero en términos budistas , cada quien tiene un proceso y debe aprender a ver que todo es impermanente, que todo pasa , todo va y viene, para nosotros los apegados es dificil soltar, tanto la alegría como la desdicha; yo no puedo aun.
Es intolerante para mi saber que todo acabará, adictos a la dopamina , adictos al dolor, pobres humanos no vemos mas allá de nuestras narices, no sabemos que hay un mundo enorme y que esta es la ley que nos rige, entre la estupidez de querer ser públicos, importantes y aceptados se nos va la vida actual posteando cosas, dejando atras lo tangible, lo real, vivimos en un mundo de hologramas, vivimos pensando en todos lo que estan alejados de nosotros, en los que ya fueron o los que serán, estar en el aqui y ahora requiere valor y coraje, requiere un esfuerzo muy grande prestar atención a los momentos que estamos viviendo, pensando constantemente en la postal perfecta para demostrar mis sentimientos, mis logros, mis amores, mis tesoros, mis mis mis,... y dejamos a un lado lo que podemos tocar y sentir, estoy agobiada y desconcertada de tanta realidad absurda y sin propósito, llegar a casa y darte cuenta que todo fue una mentira y que este dia ya fue y que mañana no esta ni siquiera cerca de ser lo que vos querés.
Hay filosofías , hay religiones, hay teorías, pero, ?¿cuando habrá sentir? cuando vamos a abrazar duro el momento que vamos a crear. Todo surge y desaparece, todo es un devenir de cotidianidad de creación absurda y de estereotipos banales.
Mi sentimiento ahora es muy estúpido, mi cuerpo esta en un lugar y mi espíritu esta muy lejos, acompañando a un espíritu del cual me volví adicta, volver a mi es algo que aun no puedo hacer, no quiero, aunque es muy agotador viajar miles de kilómetros sigo apegada a una idea y a un sentimiento que puedo crear.
Aun en mis mas absurdas creencias , tomo el tiempo para analizar la estupidez de mis acciones y río a carcajadas, aunque la puerta de vidrio es una constante en mi vida, tampoco la quiero abrir, sigo esperando a que alguien mas la abra y entre o me saque al jardín, alguien con el alma fuerte y sin miedo de abrir la puerta, quebrarla si es necesario, tengo miedo que pase, pero espero esta próxima vez no pedirle que me vea desde afuera a través del vidrio, espero esta vez sentirlo y que la absurda impermanencia sea efímera tal cual, y permita una trascendencia de vida, enseñanza y acompañamiento existencial.